La vida es un juego, apréndelo.

Y a pesar de todo, te sigo necesitando a mi lado. Sigo queriendo que algún día las cosas, aunque no vuelvan a ser como antes, mejoren. Que hemos podido tener nuestros más y nuestros menos, pero joder, esto no tendría que ser ahora mismo así. El vernos y tan siquiera mirarnos ninguno de los dos a la cara. Pero a veces hace falta que se vaya nuestro amigo para que nos demos cuenta del valor real de su amistad. Hace falta meter la pata hasta el fondo para darnos cuenta de nuestros errores. Demuéstrame que aquello de "las segundas oportunidades nunca importan, la gente nunca cambia" contigo, no funciona.

-Yo no quiero seguir jugando a este juego estúpido, la gente que se quiere no se trata mal. No lo empieces ahora, por favor.